jueves, 21 de febrero de 2013

Tau Ten, la historia de un sueño grande con trenes chiquitos...





Cuando decimos que los verdaderos protagonistas de Tau Ten son la familia y los amigos no nos equivocamos... desde el primer desafío de armar y decorar una maqueta para exhibirla, en 2000, cuando los amigos de AFeNa nos invitan a participar de lo que sería nuestra primer exposición como expositores, el trabajo que encaramos necesitó de un equipo... y así nacimos.
Juani con su exclamación -¡tau ten! (¡chau tren!)- al paso de los eléctricos del Roca por las barreras de Adrogué, fue quien bautizó al grupo.
Mi tía Liliana me propuso que en la tabla de madera donde yo construiría mi maqueta nacional (proyecto aún lejano) podríamos armar el Marklin que mi primo Juan Manuel había reunido de chiquito (entre viejas piezas heredadas de su tío Adrian y nuevas adquisiciones promovidas por mi tío Rubén) y que desde hacía varios años descansaba en un estante muuuy alto de un placar en la casa de la calle Obligado.
Sumamos a mi amigo y compadre José al desafío de armar en tiempo record la maqueta para exponerla decorada en la muestra a la que fuimos invitados en una escuela de la Capital.
Por supuesto que el equipo no eramos solo nosotros... había otros que silenciosos y lejos de los flashes colaboraban con el proyecto (soportaban)... mi esposa Gaby, que todavía me sigue bancando, y el resto de las familias que siempre apoyaron.


Y arrancamos, ubicamos la tabla en el living de nuestra casa de Rafael Calzada, y durante varias tardes colocamos vías, teñimos aserrín, cortamos maderas, pintamos cartón, llenamos el piso con bolitas de telgopor, hicimos mucha mugre y tomamos muchos mates...



Manu y su especialidad, la parte eléctrica.


Lejos de la maqueta, Manu en su casa, fabricando de todo, tanques, postes, árboles...


...muchos árboles. Manu también armó edificios, hizo señales y muchos detalles.


La montaña de Cerro Chico, donde Gaby dejó su marca, sí, ella también metió mano...



Liliana en su rol de Directora de Arte, pero aclaremos, nunca su participación fue pasiva, para nada... ella es una ferromodelista con todas las letras, tiñó aserrín, construyó edificios junto a Rubén, pintó de todo, pegó de todo, operó trenes, dio el aliento, interactuó con el público, y dijo presente en todas las exposiciones.



Y José, un capo!!! no paró nunca, desde esos primeros pasos hasta los últimos días míos en Buenos Aires fue protagonista de los dos proyectos, la maqueta Tau Ten I (Marklin) y Tau Ten II (Adrogué-Burzaco), haciendo de todo y acompañando siempre.


¡Hay equipo! y ¡hay maqueta!
Finalmente la dimos por inaugurada en la expo que los colegas de AFeNa y la Asociación Modulares habían organizado para los días 25 y 26 de Noviembre de 2000 en la Escuela República Oriental del Uruguay en la calle Carabobo.  Allí estrenamos tendido y experimentamos eso de estar en una muestra "del otro lado del mostrador", codo a codo con colegas ferromodelistas y compartiendo nuestra experiencia con público de todas las edades.



La maqueta Tau Ten I armada y detallada en el comedor de la casa de la calle Obligado en Adrogué.


La avenida principal de Cerro Chico (nuestro pueblo imaginario) donde se lucían las casitas Faller (alemanas) que muchos años antes ensamblamos con Liliana para las primeras "armadas" del Marklin... eramos tan jóvenes...



Mi primer estación hecha en madera balsa y cartulina, y al fondo el Cerro Chico que da nombre al pueblo.
Los farolitos Marklin iluminaban la escena cuando las luces reales se apagaban.



Mis trenes nacionales se colaron entre los alemanes de Marklin, obvio, con la loco sin andar ya que necesitaba de otro tipo de alimentación eléctrica... pero en las fotos salía igual mi GT 22 9014!!!
En una segunda etapa, de los talleres de la calle Obligado (Liliana, Manu & Rubén Co.) salieron detalles como postes de señales, puente peatonal y puente de señales.



Otra expo, más mates, y la casita del campo de los Ibáñez en primer plano.
José se perdió tantos partidos de Boca viniendo a las expos!!!


En estas fotos del amigo y colega Sergio Saike (recomendamos su página: http://www.saikehobbies.com.ar/) se observan detalles de la maqueta armada en una muestra en el Colegio Benito Nazar de Capital.





El depósito de locomotoras de Cerro Chico... recuerdo el malicioso comentario de una joven del público que dijo -los ladrillos están dibujados con birome!!!- pero jamas vimos el galpón que hizo ella...
Y la GT otra vez... esperando el día en que su maqueta nacional se hiciera realidad...



Como en todo pueblo tranquilo la gente a veces se confía demasiado y entonces pasan las cosas...
el conductor de la cupecita no miró para ambos lados y la vaporera (la 3003 de Marklin) se lo llevó puesto, cerquita del pago de los Ibañez.



Esta casita tiene un significado especial para Liliana y espero que lo cuente en algún comentario a esta entrada del blog...



La playa de cargas de Km 12 en una vista desde el Cerro Chico.
Pregúntenle a José ¿porque se llamó Km 12? 



Cruzada del local con el expreso en el paso a nivel de Cerro Chico.



La zona de la playa de cargas, galpones y tinglados de Liliana, Manu & Rubén Co. junto a un galponcito marca Tyco bajo la luz del hermoso farol antiguo de Marklin.





Las casitas Faller siempre se lucen, el edificio frente a la plaza también es de esta marca. Mi estación de madera balsa, que inventé cuando aún no accedía por Internet a las fotos de nuestras estaciones argentinas para tomar un modelo más criollo.  Andenes de cartón, bancos de madera de pino y personajes de Preiser (todos extranjeros, obvio).



Y rematamos esta primera parte con el vivero Ibañez, un detalle que no podía faltar, con sus chapas de techo transparentes y sus macetas colgantes... bue! pa' ver esos detalles hacía falta por esos tiempos una cámara digital...

Así empezó la historia, ya seguiremos con su continuación, pero créannos que a esta altura estábamos muy contentos y orgullosos de nuestra maqueta itinerante, de la experiencia vivida en las expos y del primer y gran paso dado en este proyecto llamado Tau Ten... continuará...